Una correcta higiene bucal es fundamental para tener dientes y encías sanas. Una boca limpia luce y huele saludablemente, los dientes están limpios y sin restos de comida, las encías se ven rosadas y no sangran durante el cepillado. La lengua se observa rosada, sin coloraciones grises y el mal aliento no es problema frecuente.
¿Qué hacer para mantener la boca sana?
- Beber suficiente agua diariamente. Además de todos los beneficios para la salud, el flúor contenido en el agua potable ayuda a fortalecer los dientes.
- Practicar una adecuada higiene bucal. Eso significa cepillarse por lo menos 2 veces al día, idealmente después de cada comida. Utilizar una pasta de diente que contenga flúor, y además realizar un aseo interdental con seda dental, hilo dental, o cepillos interdentales.
- Visitar periódicamente al dentista 1 o 2 veces al año.
- No consumir tabaco y limitar el uso de bebidas alcohólicas. El abuso de ambas sustancias está relacionado varios problemas en la boca, entre ellos el cáncer bucal.
- En personas que viven con diabetes, mantener un buen control de la glicemia. Esto disminuye el riesgo de tener enfermedades de la encía, y a la vez una encía sana puede permitir tener un mejor control de la diabetes. Puede leer más sobre diabetes aquí.
- En personas que sufren de boca seca debido a medicamentos indicados por el médico, pedirle al doctor que revise y evalúe el recambio de los medicamentos. Si no se puede evitar el sufrir de boca seca, beber abundante agua, usar pastas con alto contenido de flúor, evitar el tabaco y consultar al dentista periódicamente.
- Los niños en edad preescolar, y las personas dependientes de un cuidador, necesitan que el cepillado dental sea realizado o supervisado por un adulto.
¿Cuál es el cepillo de dientes más adecuado?
Un cepillo de dientes adecuado tiene que tener un mango fácil de tomar, una cabeza que cubra unos tres dientes aproximadamente, y que tenga una gran cantidad de filamentos blandos. Mientras más filamentos tenga un cepillo, mejor será. Los filamentos o cerdas duras no se recomiendan, ya que desgastan los dientes causando retracción de la encía e hipersensibilidad. Es mejor cambiar un cepillo duro, por uno blando de buena calidad.
El cepillo de dientes debe tener filamentos suaves, ya que los filamentos duros desgastan los dientes causando problemas.
¿Es necesaria la higiene interdental?
En personas adultas si, es tan importante como el cepillado normal. Esto porque el cepillo no puede entrar en los espacios interdentales que quedan ocultos a la vista. La placa bacteriana que se junta aquí producirá inflamación de la encía y caries si no se elimina periódicamente.
Mientras que el cepillado de dientes debe hacerse por lo menos 2 veces al día, el aseo interdental basta hacerlo cada 24 horas.
Para realizar un aseo interdental, se puede utilizar seda o hilo dental. En personas que tienen los dientes separados o con la encía retraída, se aconsejan los cepillos interdentales o interproximales. Últimamente se han popularizado los irrigadores bucales que son muy útiles para limpiar zonas difíciles de llegar. No se aconseja el uso de mondadientes porque puede ser muy traumático para la encía.
¿Son necesarios los enjuagatorios en la higiene diaria?
Ningún enjuagatorio es capaz de reemplazar el cepillado, ya que la placa bacteriana solo puede ser removida por el cepillado. Los enjuagues solo sirven como ayuda en algunos casos puntuales:
- Enjuagues antibacterianos: sirven como ayuda para disminuir la carga bacteriana, pero siempre deben usarse después del cepillado dental. Se recomiendan para personas que sufren de enfermedad de las encías, personas con infecciones del tracto respiratorio superior, o después de cirugías bucales para prevenir infecciones. Los enjuagues antibacterianos más usados son los que contienen Clorhexidina al 0,12%, y se recomienda evitar los que contienen Alcohol.
- Enjuagues altos en fluor: sirven como ayuda para fortalecer los dientes en personas que tienen dificultad para cepillarse los dientes, personas con alto riesgo de caries, y personas que sufren de boca seca.
- Enjuagues contra la halitosis: contienen compuestos, como el cloruro de cetilpiridinio, que neutralizan los compuestos sulfurados que provocan el mal aliento. Si el mal aliento no cede con estos productos, se recomienda consultar al especialista.
Los enjuagues cosméticos, que se venden en supermercados y en góndolas de farmacias, están formulados para dejar una sensación refrescante en la boca, pero por sí solos no producen beneficios en la salud bucal. Ningún enjuague reemplaza el cepillado de dientes.